¿Qué es Yoga Facial?
Yoga Facial puede quitar 10 años de tu rostro en un corto periodo de tiempo.
Son como el botox pero sin agujas. Y hay que hacerlos cada mañana antes de aplicarse las cremas. De esta manera los músculos se despiertan y se activa la microcirculación. Los ingredientes activos de los productos de belleza encontrarán después las condiciones óptimas para actuar.
10 EJERCICIOS BÁSICOS
Yoga Facial
- Calentamiento: realice pequeños círculos concéntricos con los dedos en el cuero cabelludo, como si estuviera lavándose el pelo. Activan la circulación y liberan tensiones.
- Coge los lóbulos de las orejas entre el pulgar y el índice, y levántalos con pequeñas presiones hacia la punta de las orejas: parece increíble pero esto despierta el rostro al instante.
- Luchar contra la flacidez. Un movimiento para el platisma, el mayor músculo del cuello: poniendo los puños cerrados bajo la barbilla, intenta abrir la boca haciendo fuerza con los nudillos. Repite 30 veces.
- Otro más para el cuello: con la barbilla hacia arriba, trata de sonreír hacia abajo 10 veces.
- Con la barbilla levantada, envía besos o sopla hacia arriba 30 veces. Este ejercicio y el anterior ayuda a estirar el cuello y a definir el óvalo facial.
- Contra las arrugas verticales alrededor de la boca: hincha las mejillas con efecto pez globo. Ayuda a relajarlas desde el interior de la boca.
- Levantar los pómulos: haz una sonrisa torcida, primero en un lado, luego en el otro, 15 en cada uno.
- Contorno de ojos relajado: prueba el ejercicio del telescopio. Intenta abrir los párpados con los dedos colocados como anteojos imaginarios alrededor de los ojos. Repite 30 veces.
- Suavizar las arrugas horizontales en la frente: poniendo las yemas de los dedos en el centro de la frente, horizontalmente, empuja con los dedos suavemente hacia arriba mientras miras hacia abajo.
- Y para las verticales: intenta fruncir el ceño, haciendo resistencia con la punta de los dedos, esta vez verticalmente. 30 repeticiones.
La belleza no es sólo la forma de la apariencia afuera, es el estado interno que refleja el exterior.
La belleza viene de nuestra autoestima y autosatisfacción. Lo que significa que tenemos que estar satisfechos con nosotros mismos para sentirnos bien en nuestra propia piel.
¿Sabías que tu cara tiene más que 50 músculos?
Si ejercitamos los músculos del cuerpo para tonificarlos y mejorar la forma, ¿no es lógico que ejercitemos los músculos de la cara también para mantener la juventud? Con la edad, el nivel del colágeno disminuye en el cuerpo y la piel se vuelve menos elástica y pierde la batalla contra la gravedad que tira todo hacia abajo, incluso nuestra cara.
La piel de nuestro rostro está directamente conectada a los músculos. Si no los activamos, la piel comienza a aflojar junto con los músculos que están perdiendo el tono. También, se forman arrugas, algunas son superficiales y otras más profundas y marcadas. Provienen de la hinchazón y tensión en los músculos. El yoga facial se dedica a tonificar y activar los músculos, pero también a estirarlos, relajarlos y liberar tensión.
Los músculos faciales son más delicados y pequeños que los músculos del cuerpo. Por eso necesitan menos tiempo para tonificar haciendo que los resultados sean visibles más rápido que con los corporales. Cuando se comienza con el yoga facial, se debe practicar todos los días durante 15-20 minutos, siendo visibles los primeros resultados después de 2 semanas: una complexión de la piel mejorada, el tono más unificado, hinchazón y ojeras disminuidas.
Y después de uno o dos meses se pueden notar las mejillas más levantadas y tonificadas, pómulos más pronunciados, arrugas reducidas y alisadas en la frente, alrededor de los ojos, alrededor de los labios, pliegues naso genianos alisados, la papada disminuida, piel más apretada en el cuello y mayor volumen de los labios, todo dependiendo de qué ejercicios se hacen y qué músculos se activan en tu rutina diaria de ejercicios.
Si se practica con regularidad, el yoga facial tiene resultados duraderos. Inicialmente, se puede comenzar haciendo los ejercicios todos los días, y cuando se logran los resultados deseados, el número de días por ejercicio se puede reducir en dos o tres veces por semana.